09.09.2010, 21:20
Diego, José de
Puerto Rico 1866 - 1918
Cosas divinas
Según dicen, de Dios son las esposas
las castísimas sores del convento,
y, se lo digo a Dios como lo siento:
¡tiene algunas esposas muy hermosas!
Pero suceden por desgracia cosas
en tal o cual divino casamiento,
que, francamente hablando, no las cuento
por si las leen niñas ruborosas.
A las monjas bonitas, sus afanes
consagra el capellán, y eso es un robo
que Dios tolera a semejantes canes.
Dicho lo cual comprenderá el más bobo,
que no dejan de ser los capellanes
representantes de El en nuestro globo.
Puerto Rico 1866 - 1918
Cosas divinas
Según dicen, de Dios son las esposas
las castísimas sores del convento,
y, se lo digo a Dios como lo siento:
¡tiene algunas esposas muy hermosas!
Pero suceden por desgracia cosas
en tal o cual divino casamiento,
que, francamente hablando, no las cuento
por si las leen niñas ruborosas.
A las monjas bonitas, sus afanes
consagra el capellán, y eso es un robo
que Dios tolera a semejantes canes.
Dicho lo cual comprenderá el más bobo,
que no dejan de ser los capellanes
representantes de El en nuestro globo.