21.08.2010, 14:05
Tántalo
¡No compares al suyo mi suplicio!
Estar cerca de ti, y a todas horas;
ver copiada en tus líneas seductoras
la imagen que en mis sueños acaricio;
sentir como trabajan alma y juicio
inquietudes rebeldes o traidoras,
llorar si ríes, y callar si lloras...
¿Cabe más doloroso sacrificio?
Del lago encadenado a la ribera
Tántalo, a quien la fiebre consumía,
miraba el agua que beber quisiera
y de sus labios trémulos huía...
Tú, manantial de amor, no huyes siquiera,
¡y está en tu fondo la ventura mía!
¡No compares al suyo mi suplicio!
Estar cerca de ti, y a todas horas;
ver copiada en tus líneas seductoras
la imagen que en mis sueños acaricio;
sentir como trabajan alma y juicio
inquietudes rebeldes o traidoras,
llorar si ríes, y callar si lloras...
¿Cabe más doloroso sacrificio?
Del lago encadenado a la ribera
Tántalo, a quien la fiebre consumía,
miraba el agua que beber quisiera
y de sus labios trémulos huía...
Tú, manantial de amor, no huyes siquiera,
¡y está en tu fondo la ventura mía!